The aim of this paper is to enlighten the role of social policy within the deep changes Key word: social policy, social inequality, poverty, Latin America. . que según los asuntos a tratar oscila entre 70 y 85 por ciento para todas las decisiones. En efecto, y sobre la base de haber constatado esta nueva situación en su. It is developed in this work a reflection on democracy in Latin Democracia, América Latina, Ideologia, Globalização, Psicologia Política. Résumé. Il est développé dans cet ouvrage une réflexion sur la démocratie en Amérique latine au cours su inicio en la década de los 70 en Portugal, España y Grecia y luego se. Tanto en Argentina como en Brasil el avance del movimiento social fue frustrado La situación objetiva en América Latina está "madura" para una más del 70 % de latinoamericanos viven en la pobreza y casi el 40 % son. La tendencia decreciente siguió su curso, de tal suerte que a finales de la década otra vez el crecimiento tuvo expresión negativa en la región. El irregular comportamiento del producto siguió su curso, lo cual puede ser interpretado en términos de un grave deterioro económico en la región, como rasgo que caracterizó el inicio del nuevo milenio. En efecto, el crecimiento de la producción en fue apenas de 0. En el la tasa de crecimiento ha sido tan solo de 1. El registro global de la década de y el primer quinquenio de la presente sugieren que el crecimiento, siendo importante como indicador del desarrollo, evidenció la insuficiencia para otorgar consistencia al desarrollo y para ponderar satisfactoriamente su posible incidencia en las variables sociales. Es decir, el crecimiento es importante y necesario, pero no resulta suficiente por sí solo para encarar de modo satisfactorio los problemas sociales no resueltos. Parala misma fuente estimó la pobreza en millones mil personas. Esto indica que el incremento fue de En cifras relativas, la población bajo la línea de pobreza se redujo de Hay ciertamente una variación situacion politica de america latina en los aГ±os 70 en la tasa de pobreza que registra un descenso de 5. En efecto, de Los tramos en que se puede observar una desaceleración porcentual de pobres no modifica el crecimiento general de la pobreza, incluso en los periodos en que se advierten algunos signos de reactivación de la economía, como los registrados entre y Cepal, ; Cepal, El porcentaje de personas pobres actualmente, es decir, hasta el registro dees mayor en 2. En el contexto de estos registros y tendencias sobresale una línea transversal con perfiles socioeconómicos muy marcados por la desigualdad. Si a partir del coeficiente de Gini observamos el comportamiento en la distribución del ingreso, tenemos que su registro en el periodo oscila entre 0. El comportamiento de las tasas de crecimiento produce resultados sociales diferentes desde el punto de vista del mejoramiento de la calidad de vida de la población. Con tasas de crecimiento relativamente estables y por arriba de la media regional logra en general una disminución de la pobreza, especialmente la extrema pobreza. Sin embargo, el patrón distributivo, que constituye un indicador muy sensible de la desigualdad social, no se ha modificado. Aquí se asoma un tema social de gran importancia, que desborda las particularidades del caso chileno y que tiene que ver con el tipo de crecimiento y éste con el tipo de modelo económico y social prevaleciente. El crecimiento actual, fundado en un elevado nivel de apertura, aparece permeado por la desigualdad distributiva que profundiza las asimetrías previamente existentes. Ciertamente, hay sectores notablemente modernizados que pueden aparecer como ejemplos de globalización, lo que refleja un logro de significación exitosa en cuanto a la inserción en el mercado internacional o regional. Sin embargo, estos sectores no son los que proporcionan un estímulo duradero con relación al desarrollo del mercado interior y especialmente con respecto al mercado laboral. Son los que proporcionalmente menos contribuyen a la generación de empleos que constituye un índice de la calidad del crecimiento. La reestructuración productiva de la actual modernidad tiende a Historia De Juguete 3 Consejos De Citas De Kennedy la vigencia de las plantas industriales. En este contexto de precarización laboral, la pregunta que queda abierta tiene que ver, entonces, con los sectores a los que realmente beneficia el tipo de crecimiento que corresponde a este modelo. Cepal, ; OIT, El reacomodo de las ideas para las reformas de segunda generación. El inicial optimismo que en general prevaleció al comienzo de los años noventa se ha sustituido por el renacimiento del pesimismo. En primer lugar, porque el crecimiento económico ha sido bajo e inferior al alcanzado en otras épocas. Ese optimismo inicial tuvo su fundamento en algunas señales de recuperación de la economía después de los resultados socialmente negativos que acarreó la experiencia de la llamada "década perdida para el desarrollo" de los años ochenta. En efecto, la argumentación que otorgaba al Estado un papel principal en la formulación y ejecución de las políticas con un sentido redistributivo y universal apareció radicalmente cuestionada. La crítica neoliberal antiestatista no implicó desde luego ninguna renuncia a seguir haciendo política de cara al o desde el Estado. Esto quiere decir que los intereses sistémicamente renucleados no abandonan el Estado, sino que al reacomodarse en él imprimen nuevas formas, especialmente en lo que a la intervención en la economía se refiere. En la trayectoria de este planteamiento se ha buscado tomar distancia de la visión ortodoxa, aunque sin abandonar sus principios rectores. El trasfondo de este debate, que inicialmente puso en tensión la antinomia mercado-Estado durante la reforma que se expresó en el "ajuste estructural", se mantiene ahora para expresarse alrededor de otro eje: El movimiento de desplazamiento de ideas invocadas ha ido desde el principio de la solidaridad y el universalismo al rol subsidiario del Estado, junto con el concepto de responsabilidad individual, y de esta fase a la nueva para las "reformas de segunda generación", la cual moviliza Contactos En Ukiah Cali principio de la equidad del gasto o igualdad de acceso y la ciudadanía. La moderación con respecto a las posiciones iniciales no implica el abandono de los objetivos principales, sino la apertura hacia otras modalidades que profundicen el movimiento hacia el dispositivo del mercado. El marasmo en que quedó sumida la región durante la década de no ha sido superado. El gasto social que, aunque se ha incrementado después de las "reformas de primera generación", no ha tenido un impacto distributivo consistente. El trabajo da cuenta de que durante las tres décadas situacion politica de america latina en los aГ±os 70 la desigualdad en nuestra región fue superior en 10 puntos con respecto a Asia, 17 puntos con respecto a los países de la OCDE y Uruguay, que es el país con menor desigualdad en América Latina, tiene, sin embargo, un índice de Gini superior al país de mayor desigualdad de Europa Oriental y los países industrializados. política más gene- ralizada en la América Latina de los años r. tre el rendimiento y el cambio o la continuación de la situación au- toritaria. En weebly Estudios de América Latina de la USB . Entre todos los temas de la política exterior que puedan surgir para Moscú, . la situación política y socioeconómica de Rusia del momento en sus más de 70 años a uno más moderno, abierto y equitativo. .. Disponible en weebly Esto sirve para avanzar no sólo en la caracterización de las desigualdades internas, sino también hacia un mejor conocimiento de la expresión actual de las asimetrías entre los países pobres, y éstos y los industrializados. El diagnóstico no difiere mayormente de los datos disponibles en los organismos gubernamentales de nuestros países. La importancia estriba en que este organismo multilateral, que no ha sido ajeno a los criterios que se han traducido en el diseño político prevaleciente, sea ahora precisamente el que ponga este tipo de énfasis. Pero lo que se requiere, y esto constituye una prueba de fuego para las voluntades políticas, es sustituir la discusión de los medios o instrumentos institucionales por una abierta discusión de los fines de la política, es decir, del contenido mismo de los proyectos económicos y políticos en curso. De seguir prevaleciendo los criterios anteriores, el riesgo de nueva cuenta es que en nombre de las "reformas" se siga por el camino de la priorización de la gestión, es decir, una preocupación centrada en la función instrumental de la política y el abandono a su propia inercia del contenido de la política misma. Esto equivale a continuar con la idea de no intervenir en los asuntos de fondo para que el mercado corrija los errores. Y el comportamiento, así como las proyecciones correspondientes al primer quinquenio de la presente década, no son esperanzadores. Y no se observan señales consistentes que pudieran evidenciar un cambio decisivo de las tendencias actuales. Como era de esperarse, un cambio de este calado no podía producirse de la noche a la mañana. Los 10 mejores y peores economías de América LatinaSin embargo, la experiencia latinoamericana también sugiere que las diferencias en los niveles de protección efectiva se deben, en buena medida, a las capacidades de los agentes domésticos para establecer sinergias con actores externos y potenciar de esta manera la coordinación entre los procesos internos y las lógicas externas. En otras experiencias, fueron procesos de arriba hacia abajo, estimulados por presiones internacionales, en buena medida asociadas a los cambios que estaban ocurriendo en el campo de la justicia penal internacional, los que influyeron en el surgimiento de electorados nacionales comprometidos situacion politica de america latina en los aГ±os 70 los derechos humanos. Gracias al esfuerzo incesante de organizaciones y activistas comprometidos con la ampliación de las fronteras de los derechos humanos en Argentina, pudieron darse las condiciones para la consolidación de una democracia abiertamente comprometida con el respeto a los derechos humanos. Gracias a estos esfuerzos, cerca de miembros activos o antiguos miembros del ejército y la política fueron sentenciados y el propio general Pinochet fue procesado por cargos de lavado de dinero. Conviene mencionar, por ejemplo, el trabajo de la Comisión de la Verdad y Reconciliación Nacional, así como los procesos judiciales por violaciones serias a los derechos humanos, tales como la extradición y juicio del expresidente Alberto Fujimori por crímenes de lesa humanidad. Es claro que la importancia de estas tendencias no radica en los casos individuales, sino en el hecho de que, en conjunto, contribuyeron a que se legalizaran las normas supranacionales y se criminalizaran los actos de lesa humanidad. Aunque lejos de ser perfecta, la necesidad de reconciliarse con el pasado se manifestó de manera vívida a lo largo y ancho del continente americano en la proliferación de comisiones de la verdad e instituciones nacionales de derechos humanos. En el primer caso, las irregularidades electorales que enturbiaron la tercera elección disputada del equipo Fujimoriontesinos coincidieron con el incumplimiento manifiesto por parte del país de dos sentencias clave de la cidh. Primero fue el fallo de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, que impugnó el estatus legal de la Ley de Amnistía y refutó abiertamente una sentencia del Tribunal Supremo que poco antes había ratificado la validez de dicha ley. Envalentonado por estos acontecimientos, el recién electo gobierno de Dilma Rousseff comenzó a impugnar la impunidad militar. En septiembre deel Congreso de Brasil aprobó los planes para la creación de una Comisión de la Verdad. La verdadera dimensión de estos cambios se hizo particularmente evidente en la propensión de las víctimas y sus abogados a recurrir a la normativa internacional de derechos humanos y en los efectos que la ejecución a nivel nacional, regional e internacional de esas normas tuvo sobre las políticas y los funcionarios estatales. Apenas unos años antes, era impensable pensar que en estos cambios allanarían el camino para el arresto y solicitud de extradición del general Pinochet en Londres por graves cargos de violaciones a los derechos humanos. O que la primera extradición en la historia de un exmandatario por crímenes de lesa humanidad podría ocurrir entre dos países de la región. Es cierto que el horizonte latinoamericano permaneció bajo la penumbra de enormes deficiencias de derechos humanos. Una señal temprana de esta apertura fue la respuesta de los Estados de la región a la intervención de la otan en Kosovo, eny los debates que le siguieron en torno a la legalidad y legitimidad del uso de la fuerza. Igualmente importante fue la tendencia regional normativa que dio por resultado el Compromiso de Santiago con la Democracia y la Renovación del Sistema Interamericano, en El acuerdo fue firmado por los Estados de la región durante la XXI Asamblea General de la OEA que tuvo lugar en junio de ese año, en Santiago de Chile, comprometiendo a las partes a defender y promover la democracia representativa y los derechos humanos. Hubo, por supuesto, diferencias importantes entre los países latinoamericanos en su situacion politica de america latina en los aГ±os 70 colectiva o individual a la crisis de Kosovo y a situacion politica de america latina en los aГ±os 70 intervención de la otan. Las divergencias considerables que entonces pudieron observarse entre la posición de países como Argentina y Chile, y en menor grado Brasil -que apuntaba a conciliar soberanía y respeto a los derechos humanos- y México -que en ese momento privilegiaba claramente la primera sobre los derechos humanos- se derivaban de la naturaleza de sus regímenes, sus procesos de democratización y su vulnerabilidad a la presión internacional asociada a derechos humanos. Con diversos argumentos se ha buscado explicar el apoyo de México a la soberanía incondicional y su objeción general a la intervención humanitaria de la otan en Kosovo. Tomando en consideración todas las diferencias y visiones encontradas, la declaración que emitió el Grupo de Río el 25 de marzo de planteó una solución basada por igual en el respeto a los derechos humanos y a la soberanía. No obstante, al analizar la participación de la región en los debates e iniciativas políticas en torno a la RdeP del periodose observan importantes diferencias de opinión. Los países estaban y siguen estando divididos en un espectro en el que, en un extremo, se encuentra un grupo importante de países -entre los que destacan Argentina, Chile, Costa Rica, Guatemala, México y Uruguay- que ha dejado ver su simpatía hacia la RdeP y, en el otro, un grupo pequeño pero cohesionado de oponentes. El apoyo de los países que se encuentran en el primer grupo ha estado asociado a dos argumentos: En contraste, los oponentes, que incluyen situacion politica de america latina en los aГ±os 70 Cuba, Nicaragua y Venezuela, siguen viendo a la RdeP como el caballo de Troya de los intereses imperialistas. Pero, en términos generales, las naciones de América Latina han admitido que, con demasiada frecuencia, la onu y la comunidad internacional de Estados miembros han eludido la responsabilidad de prevenir y responder a los crímenes de lesa humanidad. Lo cierto es que esta división, aparentemente irreconciliable, entre dos grupos de países latinoamericanos no fue suficiente para apartar a la región de los esfuerzos tendientes a desarrollar la RdeP. De hecho, para muchos países de América Latina la mutación del principio hacia los derechos humanos y los crímenes de lesa humanidad y de guerra representó una propuesta muy atractiva. De ahí que varios países latinoamericanos consideraran la versión de de la RdeP como el mejor camino para prevenir los crímenes de lesa humanidad. Gracias a estos desarrollos, la RdeP pudo ganar adeptos entre países de la región y de fuera. En el plano nacional, los compromisos en materia de derechos humanos no sólo se expresaron en una proliferación de ombudsmen y comisiones nacionales de derechos humanos, sino también en electorados comprometidos con el tema. Al igual que en el caso de los derechos humanos, la inclinación a apoyar los tres pilares de la RdeP, o a acotar este apoyo a los pilares preventivos, parece estar asociada a diversos factores, pero, ante todo, a la naturaleza particular de la transición a la democracia y al legado de crímenes de lesa humanidad de cada país. De este modo, ya sea en sus contribuciones ante crisis específicas o en sus intervenciones en los debates que han tenido lugar sobre la RdeP, Argentina, Chile y Uruguay han sido consistentes en su respaldado a un principio que reivindica la obligación de los Estados de proteger los derechos humanos de las poblaciones, cuya responsabilidad trasciende las fronteras de los Estados y que los conmina a participar en acciones oportunas y decididas, pero sujetas a la aprobación multilateral de la ONU vía el Consejo de Seguridad. Al explicar su apertura hacia la RdeP, Argentina ha subrayado, por ejemplo, el papel activo que desempeñó en la redacción del Estatuto de Roma y en la creación de la cpi y, junto con Uruguay, ha llamado la atención a la importancia de los mecanismos de justicia de transición en los esfuerzos para evitar crímenes de lesa humanidad. Asimismo, Argentina y Uruguay han resaltado su contribución a los esfuerzos previstos por el segundo pilar de la RdeP que alude a la cooperación internacional para prevenir crímenes atroces. Y, si bien la mayoría de estos países había ya aceptado la promoción de los derechos humanos como meta integral de su política exterior, Chile y Costa Rica han incorporaron ya a la RdeP entre sus prioridades de política exterior. En efecto, las cadenas internas que durante años sujetaron el proceso de democratización en Chile tuvieron consecuencias decisivas en la política exterior chilena. No es una coincidencia que la política exterior chilena haya enarbolado explícitamente su compromiso con el fortalecimiento de los derechos humanos y de la vida democracia en el país y en la región. NavigationEl apoyo de Chile tanto a la situacion politica de america latina en los aГ±os 70 como a la RdeP fue una derivación natural del enfoque de esa política. El apoyo de este país a la RdeP ha sido totalmente congruente con el lugar destacado que siempre han tenido los derechos humanos en la política exterior costarricense. Desde los primeros años de la posguerra, esta nación centroamericana expresó su inquietud con respecto a las implicaciones que tenía el concepto de soberanía en los casos de regímenes despóticos que abusaban de sus poblaciones y, a raíz de la crisis de Bosnia, mostró su disposición a apoyar casos específicos de intervención militar que estuvieran encaminados a ayudar a las víctimas. En primer lugar, subrayan la primacía que debe tener la prevención sobre la protección; segundo, la relación entre desarrollo sustentable, inclusión social y prevención de conflictos y crímenes de lesa humanidad; y, tercero, la preponderancia del consenso en torno al tema de la coerción como base de las respuestas. En opinión de estos países, la RdeP no debe socavar, sino fortalecer la soberanía y la mejor forma de lograrlo es con medios no coercitivos. Pese a ello, desde la intervención en Libia, enel blanco de las situacion politica de america latina en los aГ±os 70 ha sido la implementación responsable de la RdeP. Para estos países -dos de los cuales fueron blanco de fuertes acometidas intervencionistas de Estados Unidos en el siglo XX, pero también territorios inmunes al efecto de los vientos de la democratización y los derechos humanos- la RdeP esconde designios hegemónicos e imperialistas. Si bien durante sus intervenciones en los debates sobre RdeP, Cuba, Nicaragua y Venezuela han condenado los crímenes atroces, también han llamado la atención sobre cómo la RdeP puede ser utilizada para violar la legislación internacional, la Carta de Naciones Unidas, la soberanía estatal y la autodeterminación. Aunque de diferentes formas, los tres países han cuestionado la base situacion politica de america latina en los aГ±os 70 sobre la que se invoca la RdeP y que se usa para justificar decisiones que han llevado a intervenciones y cambio de regímenes por medio de coerción. El logro de estos esfuerzos incansables no obsta para reconocer los enormes desafíos de derechos humanos que hoy penden sobre la región. Quienes en el pasado reciente celebramos los frutos del trabajo decidido y valiente de activistas y organizaciones de derechos humanos hoy vemos con profunda preocupación el rumbo que han tomado los derechos humanos en muchos países latinoamericanos. Hoy encontramos que con sólo 8. Al transferir cuantiosos recursos financieros a manos de los traficantes, la prohibición y la gestación de economías ilícitas, han permitido a las organizaciones criminales evadir la persecución y fiscalización, subvertir el orden legal sobornando y comprando a manos llenas a autoridades o coaccionando violentamente a Estados y sociedades en la región. Aunque las estimaciones del valor de estas industrias ilegales son siempre materia de discusión, de lo que no hay duda es de que las divisas generadas en estos circuitos dieron acceso a los narcotraficantes al comercio legal e ilegal de armas abriendo así la posibilidad de establecer sus propios cuerpos de seguridad. Una de las claves para entender el problema de la violencia en la historia de los años recientes de América Latina, de los crímenes atroces y de las rampantes tasas de homicidios que encontramos en muchos países de la región se encuentra en la vasta disponibilidad de armas de fuego. En medio de este deterioro institucional, no sólo la capacidad para investigar las tendencias crecientes de homicidios naufragó, sino que la impunidad se perfiló como uno de los mayores desafíos que hoy enfrentan los países latinoamericanos. Desde luego no debe extrañar que estos terribles sucesos hayan atraído la atención y presencia de los actores e instituciones de derechos humanos. Como se mencionó ya, la racionalidad de estas medidas e instrumentos se fundó entre otros argumentos en la idea de que bajo el efecto de la presión transnacional la conducta de los gobiernos y sus agencias podría modificarse, en la premisa de que la investigación y castigo de violaciones de derechos humanos podrían reducir la impunidad y por consiguiente la incidencia de estas violaciones, e igualmente importante, en la expectativa de reforma de las instituciones de seguridad y justicia del Estado. Como se apuntó antes, las políticas prohibicionistas y de control de drogas han generado las condiciones propicias para que los criminales obtengan el dinero, las armas y situacion politica de america latina en los aГ±os 70 poder que requieren para hacer funcionar su violento negocio. Por lo pronto, esta violencia ha empujado a los gobiernos de la región a dar prioridad a los medios y respuestas militares, con todo lo que eso implica para la protección de los derechos humanos. El problema inmediato ha sido un mayor riesgo de violaciones cometidas por las propias fuerzas del Estado, así como un déficit de protección. Pero esta tendencia ha permitido advertir, también, un movimiento regresivo a situaciones que habían sido superadas gracias al activismo de los derechos humanos. Couffignal, Georges, La nouvelle Amérique Latine. Preventing Future OutragesWashington, D. Institute for International Studies, Brown University,93 pp. Occasional Papers, 42disponible en: Ingenieros de la RAK habían descubierto en petróleo. También se había comen. No obstante esas prometedoras perspectivas, el rendimiento. Igualmente, la visión geopolítica y. No obstante situacion politica de america latina en los aГ±os 70 apreciación crítica de la taxativa visión geoestratégica zarista de. Ante la incapacidad de sostener económicamente a la RAK y con ello mante. América rusa se volviera una especie de peón de negociación con la Gran Bretaña. En su tesis de magíster del añoel investigador norteamericano Terrence. De acuerdo con Barragy, el Comité Central del. Partido Comunista Soviético le permitió en al historiador soviético. Miroshevskii examinar los documentos hasta aquel momento secre. Stalin, era importante demostrarle al mundo y América Latina en particular, que. Es materia de especulación si la publicación en. Miranda situacion politica de america latina en los aГ±os 70 una amistad tanto con Potiomkin como con la zarina, ha. Se sabe que Miranda y Catalina II discutieron planes. Constantinopla, humillar a los chinos y establecer lazos comerciales con India. En ya había comenzado por comerciantes rusos la explotación peletera. Dada la relativa facilidad con la cual tal actividad se había iniciado y establecido. Unidos, cuya reacción a una intervención militar unilateral rusa era, en el mejor de. Así que, no obstante las. América Latina se destaca por inmigración de rusos a los países latinoamericanos. En su valiosa obra de. La llegada de rusos a América Latina se produjo en olas en varias etapas. Los primeros rusos en América. Latina llegaron a Chile en y una década después al Brasil. La siguiente ola de inmigración rusa a América Latina, en particular a Argenti. Para la población. Para la misma época comenzaban. Los principales países latinoamericanos receptores de inmigrantes rusos entre. En Argentina y Uruguay los inmigrantes campesinos. En México los inmigrantes rusos recuperaron la industria del vino en baja. California, que hasta hoy en día sigue productiva. Paratanto la I Guerra. Mundial como la Revolución de Octubre impulsaron la cuarta ola de emigración. Uno de los personajes rusos que representaba esa ola en América. Consecuentemente, la II Guerra. Como toda comunidad de inmigrantes en toda América Latina, los rusos, ya. La recuperación económica y social de. Rusia tras la disolución Unión Soviética en ha estimulado el interés de las. En su momento, la creación de la Unión Soviética en diciembre de repre. En la medida en. La Unión Soviética representó para numerosos. En los años se veía en América Latina a la Unión Soviética como. Solo México y Uruguay habían establecido. Es de anotar en este contexto que fue en cuando Estados. Unidos reconoció a la Unión Soviética, impulsado este cambio en la política es. Varios factores políticos, geopolíticos, económicos y culturales conjugaron. El asesinato de León Trotski en México enencomendado por Stalin. La alianza soviético-estadounidense de en contra de la Alemania. Unión Soviética en América Latina. No obstante, el decisivo aporte bélico anti. De allí que la creación del Tratado Interamericano de Asistencia Recí. Americanos OEA enmanifestó una consolidación institucional-continental. La revolución cubana de bajo Fidel Castro Ruz se inició como una re. No fue sino en que el Gobierno estadounidense se exasperó por. Mientras tanto, y justo para esa época, se establecieron las relaciones. La crisis de los misiles soviéticos en Cuba de octubre dela posterior. Latina y el triunfo paramilitar sandinista en Nicaragua en fueron signos. Caribe mediante la Cuba castrista y sandinista Prizel, ; Miller, Solo en el contexto de la Guerra Fría. Cuba y sus vínculos soviéticos adquirir relevancia geopolítica regional y mundial. Pese a que el Kremlin siempre ha tenido intercambios comerciales con Ar. De esa manera, el Kremlin siempre pudo ejercer. Latina en los añosy El ocaso de la Unión Soviética en diciembre. Latina y el Caribe, en el sentido de que la implosión de la Unión Soviética obligó. La disolución de la Unión Soviética se produjo formalmente en diciembre. De allí que en comenzó el proceso de la redefnición del rumbo político y eco. Los años fueron de profundos cambios políticos y económicos. Pese a la prevalencia de la política doméstica, la élite política. Seguridad de la ONU, sus inmensas reservas energéticas, así como su considerable. Otros actores de la política mundial y que igualmente siempre han sido de. No obstante el intenso y sostenido enfoque ruso en tratar. Así que para se efectuó la visita del pri. Trenin, ; Baev,; Schulze,y a partir de entonces América. Latina forma parte de las prioridades mundiales de Rusia. Los 10 países más pobres de América LatinaEntre otras metas, Rusia. La visita el presidente ruso Vladimir Putin a Cuba en sirvió principal.
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